Fuera del Vestuario

Lamentable historia sobre la vida de un futbolista islandés que decide salir del armario. Ni didáctica, ni pedagógica, ni nada. Un despropósito que bien podría ser ejemplo de cómo no rodar una película y de cómo redactar un guión sin pies ni cabeza. Menos mal que los amantes del fútbol tienen Mundial para rato.

El póster de la película parece que lodice todo: cinco jugadores de fútbol en fila y de espaldas, como si estuvieranformando una barrera, mientras uno le toca el culo al único que está giradomirando a la cámara, el protagonista principal. Digo que parece que lo dicetodo porque es inevitable pensar que el largometraje irá sobre fútbol yhomosexuales pero no.

La cinta es un bodrio de tamañomayúsculo que no convencerá a nadie. Si hay algún aficionado al fútbol que nopiense que aquí encontrará nada relacionado con el balón. ¡Ni siquiera eltípico partido final en el que el protagonista tendría que meter el gol de lavictoria en el último minuto! Tampoco aquellos que vayan buscando una temáticadiferente. Se van a encontrar con una película sin sustancia, con un relato másque forzado y sin ningún interés.

Óttar Thor (Björn Hlynur Haraldsson) es una estrella del fútbol pero, ¡ojo! enIslandia. Guapo, arrogante, se acaba de separar de Miss Islandia, una bellamujer alcoholizada con la que tiene un hijo de 13 años. Cuando decide salir delarmario es expulsado del equipo y se enrola en otro donde todos los componentesson gays. Quizá el director (Robert I.Douglas) buscara censurar el comportamiento de la sociedad ante este tipode situaciones pero el papel que vende de los homosexuales tampoco ayuda enexceso a pulir nada.

En algún sitio leí que Fuera delVestuario bien podría ser la obra de fin de curso del peor alumno de unaescuela de cinematografía. Me quedo con eso y si fuera profesor le pondría uncero (o mejor dicho, un cinco, para no volver a ver al alumno en cuestión).¡Qué desastre!