Palestina nunca muere
Veo horrorizado cómo los cuerpos de cientos de jóvenes palestinos (¿terroristas?) caen como muñecos de trapo y se esparcen malheridos sobre los áridos campos de Judea, en una lucha desigual contra un gigante que tiene casi todo menos corazón. Piedras contra balas. Gritos contra obuses. Libertad contra represión. Vida contra muerte.