Tras el subidón de energía de su single “Andante”, Showpay se encuentra bajo la batuta de Josh Tampico rematando las mezclas y el mastering del que será su nuevo disco, “III”, que verá la luz con casi toda seguridad durante el mes de abril. Bernie, Albert y Fer hacen un parón en estos días de estrés para conversar con 360 Grados Press sobre su pasado, su presente y su futuro. Música, maestro.
Todo empezó con un regalo. Una Fender Stratocaster japonesa queEstefanía, hermana de Bernie y Albert, les trae de un viaje a Singapur. Lapieza que pone en movimiento la maquinaria. Corría el mes de abril de 1992.Desde entonces, los dos hermanos han sido el núcleo sobre el que ha pivotado labanda. Una banda por la que han pasado muchos integrantes y tantos nombres queresulta difícil mencionarlos y contextualizarlos.
En 2004, ya bajo el paraguasde Showpay y con Josh Tampico como productor, el grupo se estabiliza. Laentrada de Fer en 2009 como tercer integrante de la banda añade a la maquinariala pieza que faltaba para hacer funcionar el engranaje. Showpay seprofesionaliza de la mano de su productor, que pasa a ser también directorartístico del grupo. Un año después, en octubre de 2011, ve la luz su primerdisco, 3/4. El segundo ya está en camino. Nos encontramos en SerenityStudios, el estudio de grabación de Josh Tampico, con Showpay. Albert lleva lavoz cantante en la entrevista. Bernie pone los toques de humor. Fer, máscallado y observador, hace honor a esa seriedad que ha dado a Showpay el rigory la estabilidad que necesitaba.
Si exceptuamos a Bernie yAlbert, que han sido inamovibles, desde que dierais los primeros pasos allá por1.992 por el grupo han pasado infinidad de componentes. ¿Marca tanto cambio encierto modo la esencia de Showpay?
Los cambios como tal, no. Lo que predomina acaba siendo lo que se queda.La última incorporación que ha sido Fer nos ha aportado mucha seguridad y consistencia en parte del sonido que encierto modo era lo que nos faltaba. El tener un rigor a la hora de tocar y deensayar para que esté todo perfecto. Nos hemos puesto muy críticos con nosotrosmismos.
Si hablamos de cambios, quédecir de los nombres de la banda: Mailbox, Wine ¿Lleváis la cuenta?
(Risas) Éramos demasiado jóvenes. Cometimos muchos errores sin querer. Yotros queriendo (risas). Los nombres al final también son parte de tu historia.Showpay viene ya de cuando nos llamábamos Pleasureallá por el 2.000. Surgió en el estudio mientras grabábamos. De puracasualidad. Y al final es con el que nos quedamos porque es el que más nosconvence. Con él llevamos ya casi nueve años. Y yo creo que ya se acabaron los cambios.
¿Qué importancia tiene JoshTampico en la estabilidad que habéis encontrado bajo el paraguas de Showpay yen los pasos al frente en la profesionalización de la banda?
Mucha. Josh siempre ha estado ahí. En gran parte de nuestra trayectoriaen la sombra y ahora ha pasado a estar más cercano y presente. Siempre hemostenido su punto de vista muy en cuenta y siempre que hemos tenido dudas hemosacudido a él. Para nosotros es un amigo. Su figura es muy importante paraShowpay.
En octubre de 2011 sacáis vuestroprimer EP como Showpay, 3/4. ¿Es la plasmación definitiva de un estilo quelleváis buscando más de 20 años?
El nombre de 3/4 viene de ser no un disco, ni un EP, si no un poquitomás, porque son siete temas. Fue la culminación de un trabajo de mucho tiempo ysurgió tras grabar la banda sonora de Open Graves. Más de siete temas eran imposibles,pero al final decidimos sacarlo porque queríamos dar un paso para luego llegara lo que vamos ahora, un disco mucho más personalizado y en el que nos sentimosmucho más reflejados. Un trabajo que no deja de ser muy variado en estilos,como el anterior, pero que siempre mantiene nuestra esencia. Por supuesto, hayuna evolución notable entre 3/4 y elnuevo trabajo, que tiende más a la electrónica.
¿Cuál fue la reacción de lagente a este primer trabajo?
3/4 incluía canciones que ya conocía la gente y la aceptación fuebuena. Además, de cara a los medios hicimos un diseño un poco peculiar para quellamara más la atención y tuviera más repercusión. Meter un CD en un formatovinilo tuvo su punto, porque por lo menos cumplió su función. Ahora tambiénestamos buscando la manera de llamar de nuevo la atención. Con el single hemosbuscado que sea original y llamativo el formato. Y en el disco estamos buscandotambién la manera de hacerlo diferente para que sea una joya. El single, porejemplo, lo hemos hecho con esa intención. Ha sido un proceso largo y caro,casi seis meses cambiando el logo, la portada. Todos los cambios son grandes deun disco a otro y estamos muy contentos con el salto que hemos dado adelante.
Tras ¾ llegó recientemente unnuevo single que es la primera piedra de vuestro nuevo proyecto. ¿Qué seesconde tras Andante?
Andante es un tema de baile. Para nosotros es lo más extremo del discoen cuanto a estilo, pero creemos que es un punto que diferencia muy bien elsalto y la evolución de Showpay tanto en imagen como en estilo. “Andante” escomo una locura dentro de lo que nosotros teníamos concebido como un tema deShowpay, pero que tiene en el fondo mucho sentido, porque lo que más estásonando ahora es la música dance y nosotros queríamos demostrar que somos unabanda que podemos abarcar todos los estilos.
En 2007, como ya has comentadoantes, grabasteis la banda sonora de Open Graves en lo quealgunos expertos han calificado como “la mejor producción rock española de ladécada”. Por desgracia, la película no se llegó a estrenar en España. ¿Fue unaespecie de frustración para vosotros?
En cierto modo sí, porque tener una exposición tan grande como estrenaruna película en un cine era nuestro as en la manga. Pero bueno, también nos haservido para que mucha gente nos conozca fuera de España, ya que la película seha estrenado en más de 30 países y eso nos ha permitido llegar a más público yque más gente nos escuche.
¿Es cosa mía o vosotros tambiéntenéis la sensación que vuestra música tiene más recorrido fuera de nuestrasfronteras?
Si. Estamos todos de acuerdo en que fuera de España va a tener muy buenaaceptación y creo que es llamativo que aquí en España se haga música en inglésy que sea competitiva con grupos de fuera. Siempre pensamos que si conseguimossalir fuera y llegar un poco a la gente aquí va a ser más fácil a la vuelta.Pero también tenemos que tener un mínimo aquí y es lo que pretendemos, porquetenemos que llegar de algún sitio (risas).
En un mundo marcado por la grancompetencia, toca diferenciarse para captar la atención de la gente. ¿Cuál esla seña de identidad que hace a Showpay diferente?
Nosotros nos planteamos la música como disfrute. Lo único que pretendemos es hacer cancionessencillas y que la gente disfrute con ellas, lo pase bien, sonrían . El buenrollo es nuestra bandera. Abarcamos muchos estilos y los llevamos a nuestroterreno.
En ese sentido, ¿quéimportancia tienen los conciertos como forma de daros a conocer a un públicomás amplio?
En directo, ya no porque lo digamos nosotros, sonamos muy potentes eintentamos crear un ambiente de buen rollo, al igual que con nuestra música.Nos gusta transmitir energía en los directos.
Y las redes sociales, Facebook, Twitter ¿Os apoyáis en ellas?
Mucho. Todo la que podemos. La verdad es que es una tarea difícil que,aunque parezca que no, lleva mucho tiempo. Si quieres estar ahí, hay quehacerlo continuamente. Y eso es lo complicado. Tener tiempo para crear, paragrabar, para mezclar y luego para estar ahí todo el día, para actualizarlas,para subir una foto. Pero bueno, intentamos organizarnos de la mejor manerapara que eso esté funcionando.
Tal y como está el panorama,¿se puede vivir de la música?
Sí, claro que se puede vivir de la música. Todo el mundo que está enello busca la manera. Nosotros estamos intentándolo y tengo la certeza de quelo conseguiremos. Ahora se puede decir que vivimos para la música. Todo lo que ganamoslo metemos aquí porque es nuestra apuesta. En cierto modo somos tan ingenuosque lo hacemos porque nos va bien, tocar es lo que mayor satisfacción nosproduce en el mundo. Y ver un trabajo hecho por nosotros nos llena. Y saber quehay gente a la que le gusta nos llena más todavía. Es nuestra aportación a lamúsica. Al fin y al cabo no es más que otro trabajo en el que tienes quebuscarte las castañas.
Y, por último, ¿qué hubiesesido de Showpay si vuestra hermana Estefanía no os llegar a comprar esa primeraguitarra en Singapur?
Es verdad, tío. Va a hacer 21 años ya de eso. No sé lo que costaráahora, pero ya debe ser una reliquia (risas). No sé, por otra parte hubierasalido, porque ya por entonces teníamos una guitarra española. Quizáshubiésemos hecho un poco más de flamenco (risas). Las ganas y la dirección lateníamos marcada, lo que pasa es que encontrar tu camino cuesta. Tenemos muchosmúsicos en la familia y casi que lo llevamos en la sangre.
Adrián Cordellat