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La historia de María José Martínez Maroto es de motivación, de ilusiones, de sueños, de vencer los miedos ajenos y escapar de los condicionantes y los estándares de la sociedad. Conseguir ser una Ironwoman es un camino arduo, lleno de obstáculos, que requiere de muchos sacrificios, pero ella lo consiguió. Y no solo eso, sino que lo compagina con su trabajo como empresaria al frente de Be Optimus, donde con sus consejos ayuda a otros deportistas a conseguir sus objetivos. Esta semana en 360 Grados Press hablamos con ella para conocer su experiencia.
-Para la gente que no lo sepa, qué supone ser una Ironwoman y cómo se consigue.
Se necesitan las 3 C: cabeza, corazón y coraje. Hay que tener decisión, saber qué quieres, desearlo con pasión, y estar dispuesto al sacrificio, esfuerzo y sufrimiento. Completar un sueño de estas características no es fácil, la carrera en sí es dura, porque son muchas horas pero el camino, el día a día, es más duro todavía.
-Llevas relativamente poco en este deporte, ¿cómo son tus inicios?
Empecé hace 4 años y medio, con 37 años, sin previo deporte alguno, ya que tenía otras aficiones que nada tenían que ver con el ejercicio físico. Fue “pensat i fet”, pero descubrí que no me da miedo salir de la zona de confort, de hecho, me encanta. Estoy más agusto fuera de la zona de confort que dentro. La monotonía me estresa y me aburre.
En una cena con mi ex pareja , quien quería hacer su primer Ironman tras llevar varios años practicando triatlones, le dije: “vamos” y él me contestó: ¿vamos es que me acompañas o que tú también lo haces?. Entonces, me apunté, con mi objetivo marcado, definido, y a partir de ahí a poner los medios para conseguirlo en 7 meses.
Mi primer triatlón fue en Abu Dhabi. Pocos meses después de apuntarme a mi primer Ironman en Atlantic City. Y cuando crucé la meta me dije: “¡Guau!, esto es increíble. Voy a recorrerme el mundo haciendo Ironmans o Ironmans 70.3″. Un Ironman consiste en nadar 3.800 metros, hacer 180 km de bici y correr una maratón 42,2 km , y un Ironman 70.3, en hacer la mitad de la distancia que el anterior.
-¿Cómo es un día cotidiano para ti?
Todos los días madrugo, de lunes a domingos. Compagino entrenamientos con trabajo, pero no descanso lo suficiente, y voy todo el día al milímetro. Me levantas pronto, hago un primer entrenamiento, de ahí me voy a trabajar, luego al mediodía vuelvo a entrenar, y por la tarde otra vez al trabajo. La agenda es compleja, no te sobra ni un minuto al día. Tienes que prescindir, renunciar y priorizar. Además de ponerte en manos de especialistas en nutrición para que te realicen las pruebas de esfuerzo en Nisa Salud Deportiva, ir al osteópata Holos, a poner a punto la bici Kross a Do You Bike, etc.
-¿Cuánto tiempo le dedicas al entrenamiento?
A la semana entreno un total de entre 13 a 18 horas, depende de la temporada en la que esté y de cuándo tenga las competiciones. Todo ello compaginado con mi profesión, la empresa BeOptimus, además de realizar jornadas de coaching de equipos outdoor y en barcos e impartir conferencias de motivación en empresas, asociaciones, u otros, así como talleres de mindfulness.
– Cuando decidiste sumergerte en el ‘mundo Ironman’, ¿te sentiste apoyada por tu entorno?
Hagas lo que hagas, habrá pocas personas que te apoyen y a veces, ninguna. Porque por sus miedos te transmiten mensajes bloqueantes y a menudo suelen influir tanto que impiden que otras personas cumplan sus sueños. Mensajes como : “eso es imposible”, “no lo vas lograr”, “esto no es para ti”, “una mujer no puede hacer eso”, “eres mayor” y un largo etcétera.
Otros te criticarán , algo con lo que todo ser humano ha de convivir, ya que en España si prosperas te critican, y si consigues méritos, también. A eso yo le llamo envidia, ya que hasta a los profesionales critican, por lo que mi consejo es, haz lo que desees, cumple tus sueños, y arroya toda opinión ajena que intente alejarte de tu objetivo. Reta a quien te reta. Aunque fracases seguirás siendo un ganador porque por lo menos lo intentaste y superaste tus miedos. Y en el caso probable de que lo consigas, igualmente habrás ganado por vencer tus miedos, los de los demás, y por lanzarte a cumplir tu sueño, y encima, conseguirlo.
¿Qué consejo le darías a una persona que quiera realizar estas pruebas?
Define tu sueño, el objetivo; busca los medios y el cómo conseguirlo; diseña la estrategia y el plan y ejecútalo. Esto es lo que vale , el camino, más que el resultado mismo. Lo verdaderamente difícil es salir de la zona de confort, cambiar los hábitos y las costumbres. Y eso es precisamente lo que hay que trabajar, el cambio que se necesita para conseguir un sueño.
-¿Has tenido que renunciar a cosas por tu pasión?
Sí, renuncio a muchas cosas, siempre existe el llamado “coste de oportunidad”, si eliges una cosa, renuncias a otras. En mi caso, no dispongo de tiempo ni para comer con amistades ni por las tardes para salir a dar una vuelta, pasear o ver a amistades. Solo tengo tiempo libre los sábados y domingos a partir de las 19 horas, y todo mi entorno tiene hijos, por lo que igual pasa un año y no puedo ver a la gente porque no coincidimos en agendas.
El fin de semana por la mañana lo empleo para volar y navegar, mis otras dos pasiones. Estoy en un equipo de regatas, Slainte Team, y he de entrenar en este deporte también.
-¿Qué sientes cuando corres el primer kilómetro de una carrera? ¿Y el último?
Cuando corro el primero me siento mal, es duro. Es la transición de la bici a correr, y la musculatura hay que adaptarla. Te sientes pesada, te cuesta correr, las piernas casi no van, y tiras de cabeza. Es el km más duro de la carrera. Mientras, el último es uno de los más duros porque ya no nos quedan energías, y a la vez es el que te da la sensación de que no llegas la meta, o que te la alejan. Además, sueles acelerar conforme ves la meta.
Lo mejor, esos segundos que estás bajo el arco de meta. Son maravillosos, es cuando consigues tu victoria, tu sueño. Son unos segundos, porque has de apartarte para que entren los siguientes triatletas y te saben a gloria . El mejor momento del Ironman.
-Has competido en Atlantic City, Miami, Florida, Puerto Rico, Abu Dhabi, Australia, Vichy , China o España; ¿qué próximos destinos te atraen?
Muchísimos.Tailandia, Taiwán, Argentina , Vietnam y todos los que te puedas imaginar.
-¿Qué valores has descubierto gracias a hacer triatlones?
Más que descubrir valores, he reforzado los que ya tenia por la enseñanza recibida y los adquiridos al ser empresaria. Lo que el deporte me ha enseñado es a buscar tiempo para mí y mis hobbies, a optimizarlo. Me ha enseñado a ser más concreta y concisa en el trabajo para abreviar los timming de reuniones y de trabajo. También a delegar, que aunque todo directivo digamos que delegamos, la realidad es que no, porque siempre se está revisando el trabajo del equipo o dándoles las respuestas que te preguntan en vez de ayudarles a que sean ellos quienes piensen , se “equivoquen” y aprendan por sí mismos .
Hay excesos de reuniones y una misma tarea la realizan muchas personas llevando a una pérdida de tiempo. El deporte me ha enseñado a que no se puede trabajar a full durante 12 horas seguidas , que esto fue lo que a mí me enseñaron. Hay que darle oxígeno al cerebro y ahora aplico metodologías del deporte a la dirección.
-Tengo entendido que eres conferenciante motivacional y speaker, además de coach ejecutivo, deportivo y de equipos, ¿qué papel ocupa la mente para poder practicar deportes como estos?
Así es, imparto conferencias de motivación basada en mi experiencia y conferencias de formación sobre el liderazgo, gestión del estrés, del tiempo, entre otras. Gracias a mis expertos de la alta Dirección y de la alta competición, así como disponer del Máster en Psicología y Coaching ejecutivo y deportivo. He desarrollado unos programas específicos, tanto de conferencias como de coaching, basados en la práctica y omitiendo tanta teoría , donde se va al “grano” y se aplican mis otras 3Cs, clara, concreta y concisa .
Me gustaría destacar los programas de coaching en el mar, en veleros, o realizando regatas corporativas. Construir un equipo fuerte, eficaz y eficiente pasa por vivir contextos que les hagan salir de la “zona de confort”, sumergirlo en un entorno diferente, fuera de lo usual y cotidiano , donde todas las variables son nuevas y con factores externos que no se controlan. Un evento no es simplemente una ocasión para divertirse. Nos ocupamos de aportar un valor añadido, aprovechando la oportunidad del encuentro para hacer empresa, mejorar la cohesión interna, fortalecer el sentimiento de per tenencia y reforzar los lazos de relación.
Ofrecemos claves de motivación de forma divertida e innovadora, y en un entorno único y privilegiado. El objetivo es la inmersión del participante en una actividad diferencial, dinámica, accesible a todos y dentro de un gratificante entorno, persiguiendo la máxima permanencia en su memoria, así como la vinculación de su branding a una experiencia irrepetible.
-Hace poco participaste en la Titan Desert MTB marathon, siendo la única mujer valenciana. ¿Cómo fue tu experiencia?
Fue durísima, pero muy gratificante porque al final vas consiguiendo objetivos y eso es lo que te motiva a seguir adelante.
-¿Seguirás por mucho tiempo más compitiendo?
Seguiré realizando todo aquello que me apasione, siempre perseguiré mis sueños, y si físicamente estoy bien seguiré compitiendo en Ironmans, Ironman 70.3 combinándolo con otros deportes/hobbies. Soy de vivir el presente , no pienso más allá que en el momento actual . Si sueño con navegar y bucear por el Mundo , no tardaré mucho en realizar estos sueños .
-Y por último, ¿qué marca personal te gustaría batir próximamente?
En cuanto defina objetivos deportivos, definiré los míos personales de marca, ya que recientemente he finalizado una prueba muy dura y exigente, y he precisado de una recuperación activa, entrenando, poco a poco, haciendo base. En breve decidiré futuros retos, los cuales tendré el placer de compartir con vosotr@s .
Inma Gabarda