The Bronx Kill

Si hay un género especialmente prolífico en lo que a novela gráfica se refiere este es, sin duda, el de la novela negra. El elemento noir, con su origen de literatura popular y su influencia cinematográfica encaja a las mil maravillas con el concepto de arte secuencial de la narrativa gráfica. Historias truculentas, de familias mal avenidas, de criminen, de oscuridad y de asesinato. Esos son los ingredientes de The Bronx Kill. Laos mismos que componen la esencia del género.

The Bronx Kill es un estrecho brazo deagua que separa el Bronx de Randall’s Island. Uno de satélites desconocidos queorbitan en torno al planeta Manhattan. También es la historia de MartinKeane, un escritor que debería haber sido policía. Como su padre. Como suabuelo. Como su bisabuelo. Martin rechaza esa herencia familiar aunque no puedeevitar verse enredado en otro de los legados de la familia: la extrañarelación que los Keane mantienen con Bronx Kill, el canal donde años atrásapareció el cadáver de su abuelo. Y cuando la mujer de Martin desaparece, esaherencia siniestra acaba por convertirse en una obsesión que, sin embargo,parece relacionada de algún modo con el reciente abandono de ella. Aunque todoel mundo, empezando por su padre, esté empeñado en afirmar lo contrario.

La historia está firmada por Peter Milligan, un guionista con una sólidatrayectoria escribiendo guiones para Márvel y DC que, además, ha construidoargumentos para muchos otros tebeos sin mallas entre los que destacan Hellblazer o Greek Street. Una serie que, aunque no terminó de cuajar, ofrecía unarevisión curiosa de los mitos griegos desde un punto de vista contemporáneo ybastante noir.

En The Bronx Kill le acompaña a los lápices el estilo sencillo y directode James Romberger. Un sólido complemento de lanueva ola de arte neoyorquina. Romberger es un artista conocido en su ciudadpor su tendencia hiperrealista en el retrato de los escenarios urbanos. Dehecho sus obras reflejan con extraordinaria fidelidad el espíritu de lospersonajes y de los paisajes callejeros del LowerEast Side neoyorquino.

Su dibujo es el complemento perfecto para esta historia donde elambiente adquiere también la solidez de otro protagonista. Y es que TheBronx Kill es un relato obsesivo sobre la que se superponencapas de una misma historia. Una historia que, sin embargo, ha sido vivida porcuatro generaciones diferentes de la familia Keane. Una historia de violencia quehunde sus orígenes en la Irlanda desde la que escapa el primer Keane y queterminará por arrastrar al último de los descendientes de la familia.

Quizá el mayor acierto del cómic sea precisamente ese. La capacidad quetiene la historia, a través de un desarrollo metaliterario, de envolverte y dellevarte a recorrer ese canal maldito una y otra vez. Como la fuerza de undestino macabro del que no se puede escapar. Un destino conocido, quizáesperado, pero aun así sorprendente.

Adrián Cordellat