“Si hay un ejemplo de lo que es el grupo por encima del individuo, ese es el fútbol”

La psicología ha ido ganando peso con el paso del tiempo en el mundo del deporte de élite hasta convertirse en un aspecto esencial. 360gradospress ha querido conocer un poco más de cerca esta faceta del deporte de la mano de Patricia Ramírez Loeffler, la psicóloga a la que los jugadores del Betis señalan como pieza fundamental en sus triunfos.

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Patricia RamírezLoeffler comprendió la necesidad de la psicología en el deporte desde muypequeña, cuando con sólo 12 años y compitiendo en gimnasia deportiva apreció laimportancia de mantener la concentración y afrontar las competiciones conambición y optimismo. Doce años despues empezó a volcar todos sus esfuerzos enayudar a deportistas de primer nivel. Desde 2010 forma parte del equipo deayudantes de Pepe Mel en el  Real BetisBalompié, donde todos los futbolistas la señalan como pieza clave en los logrosconseguidos por el equipo verdiblanco. Ahora aplica también sus conocimientosal ámbito empresarial. 360gradospress charla con estazaragozana a la que en Sevilla ya se conoce como ‘la psicóloga del Betis’.


Sesuele decir que el aspecto psicológico es muy importante en el deporte. ¿Sepuede conseguir un estado de ánimo óptimo en los deportistas que esté porencima de victorias o derrotas?

Las victorias y las derrotas son resultados ylos deportistas no pueden estar centrados en resultados sino en el rendimiento,porque el rendimiento está bajo el control del deportista y el resultado no.Cada vez que competimos intervienen muchas variables y si nos enfocamos alresultado, el nivel de frustración puede ser mayor. Tenemos que centrarnos enlo que está bajo nuestro control, lo que depende de nosotros. El estado anímicoserá algo más estable si planteamos objetivos basados en nuestrasresponsabilidades.


Hace nodemasiado tiempo, el aspecto psicológico parecía un poco olvidado en el mundodel deporte, como si fuese un tema secundario. De unos años a esta parte esaconcepción ha cambiado y mucho. ¿Por qué?

El deporte de alto rendimiento se vuelve cadavez más exigente y competitivo, hay competiciones en las que la diferencia sonmilésimas. Se perfeccionan todas las áreas, y los deportistas y entrenadoresbuscan cada vez más, ese punto que te diferencia de otro deportista.  Si dedicamos toda la semana a entrenar elfísico, la estrategia y la técnica, ¿por qué no dedicamos un tiempoproporcional a entrenar nuestra mente? Muchos deportistas de alta competiciónaseguran que se han venido abajo en el momento más importantes de su vida profesional,o por ansiedad, o por falta de intensidad o por falta de concentración. Elcerebro es el órgano encargado de dar órdenes, dice lo que hay que hacer y cómohay que hacerlo.


¿Cómose trabaja el aspecto psicológico en un equipo de fútbol? ¿Son trabajosindividuales, colectivos…?

Cada maestrillo tiene su librillo. Por normageneral el psicólogo deportivo no es muy dado a trabajar en grupo, pero a mí meencanta. Creo que es importante ver la dinámica del grupo cuando trabajanjuntos, que cada miembro del grupo tenga oportunidad de escuchar a sucompañero, de oír cómo va a comprometerse en el partido, saber qué ofrece algrupo, cómo se implica. Me gusta trabajar en pequeños grupos, crearcompetitividad en mis charlas, jugar, pasarlo bien, porque es la mejor manerade asimilar conocimientos que para el deportista son desconocidos.  Es fundamental que los deportistas se sientan a gusto y cómodos, que esténrelajados, sin miedo a decir tonterías, nada es censurable, todo el mundo tienealgo que aportar.


GregorioManzano, profesor y psicólogo, fue el primer entrenador de fútbol que quisocontar con su presencia en el Mallorca. ¿Imaginó alguna vez llegar tan alto, ala élite del deporte español por antonomasia?

No fue el primer entrenador, pero si el que empezóa darme continuidad. Me incorporó a su cuerpo técnico y era una más. La verdades que la llamada de Gregorio no me la esperaba. De echo pensé que era unpaciente para pedirme consulta y casi lo anoto en la agenda, recuerdo que fueuna llamada muy graciosa. Ha sido muy sencillo trabajar con él, siendopsicólogo apostaba al cien por cien por la psicología. El día que nosconocimos, antes de iniciar el trabajo en Mallorca, enseguida nos dimos cuentaque hablábamos el mismo idioma en psicología deportiva.


¿Lefacilitó las cosas en ese arranque el estar al lado de un compañero deprofesión?

Me facilitó mi trabajo el sentido común deGregorio, que pensara en la psicología deportiva como un eje transversal en elentrenamiento y preparación de un jugador. Imagino que apostar por lapsicología le vendría por su formación. Pepe Mel es otro entrenadorespectacular, inteligente, con una visión del fútbol que me gusta muchísimo. Esun líder que saca la cara por mi profesión y por mi figura, es comodísimotrabajar con él. Tiene un respeto absoluto por lo que hago y propongo, y elcuerpo técnico con el que trabajo en el Betis y con el que trabajé en Mallorcahan sido y son equipos de trabajo en los que me he sentido apoyada, cómoda yrespetada. Hay una conexión maravillosa.


¿Hastaqué punto es bueno que un entrenador tenga esa parte de docente-psicólogo a lahora de gestionar un equipo de fútbol, siempre tan plagado de egos?

Lo de los egos es un mito. Ningún equipo detrabajo, sea cual sea la empresa, trabaja tan bien en equipo como lo hace unode fútbol, baloncesto o balonmano. El interés del grupo siempre está por encimadel individual, lo llevan grabado en los genes, porque así lo trabajan desdeque son niños en la cantera. Si hay un ejemplo de lo que es el grupo por encimadel individuo, ese es el fútbol.

 

En elBetis, la temporada pasada, muchos le señalaron como la artífice del regresodel equipo verdiblanco a Primera División. ¿Tanta repercusión tiene su trabajoen el funcionamiento del equipo?

Los responsables de subir son los jugadores yel director de orquesta. Los demás estamos alrededor para ayudar con nuestrogranito de arena. Quien sale a partirse las piernas, a lesionarse, darlo todo ycorrer hasta la extenuación son los chicos. Incluso si la psicología les haservido para mejorar, también es responsabilidad de ellos, porque son los quedeciden escucharme y poner en práctica lo que les enseño.


Dejandoun poco al margen el fútbol, ¿Son los deportes individuales los que másnecesitan de un buen trabajo a nivel psicológico del deportista?

Una de las diferencias más importantes entreel deportista individual y el deporte de equipo, es que el deportistaindividual es su propio escaparte: si falla es él y si acierta, el éxito estodo para él. Cuando  perteneces a unequipo, el grupo te protege, tú haces por cubrir y ayudar a tu compañero yviceversa.  Normalmente yo llego a losequipos de la mano de un entrenador, mientras que los deportistas individuales(atletas, ciclistas, nadadores, etc.), son ellos los que me buscan a mí.


Uno vea deportistas de primer nivel como Rafa Nadal, Novak Djokovic, Usain Bolt yatletas de competiciones de fondo y admira, más allá de sus cualidadestécnicas, sus capacidades mentales. ¿Serían estos deportistas lo que son sin sucapacidad mental y de sufrimiento?

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Pues seguramente no. De estos deportistas,además de su talento prodigioso, nos llama la atención su capacidad deconcentración, actitud ganadora, como luchan hasta al límite, saben sufrir,están convencidos de que van a alcanzar su objetivo, compiten a pesar del dolory el cansancio, no bajan los brazos nunca…


¿A quédeportista admiras por encima de los demás en el aspecto psicológico?

A los que llevo yo, que vivo diariamente susesfuerzos por superarse. Y a todos aquellos que llegan a la meta con calambres,desfallecidos, deshidratados y con vómitos. Son capaces de todo con tal dehacer realidad sus sueños.


Ahoraestá aplicando sus conocimientos a nivel empresarial. ¿Hay mucha diferenciaentre la gestión de un vestuario y el manejo de un equipo de trabajo?

Hay más puntos en común que diferencias. Ambostienen que trabajar en equipo para alcanzar los objetivos, con ambición, conprofesionalidad, bajo presiones. Tanto en la empresa como en el deporte sebuscan resultados.  La diferencia mayores que en los equipos deportivos saben trabajar mucho mejor en equipo, llevantoda la vida haciéndolo, y no siempre con el mismo grupo de trabajo, porque haycompañeros que entran y salen cada temporada, y todos se ven obligados atrabajar la cohesión, facilitar la entrada de los nuevos y coordinarserápidamente porque cada fin de semana es un examen.


Con lacrisis, los puestos de trabajo en continuo peligro y los ERE amenazando a cadamomento, debe resultar todavía más difícil motivar a los trabajadores. ¿Quéconsejo le darías a un empresario que se encuentra en esa situación?

Que sea muy prudente y cuidadoso con lainformación. En momentos de incertidumbre, cualquier información en la empresase convierte en un rumor de lo más tóxico. Los trabajadores terminan estandomás preocupados por lo que se dice que por su trabajo. Se vive en la empresabajo un estado de tensión tremendo pensando que el próximo vas a ser tú.  Hay que ser honesto con los trabajadores, nomandar mensajes contradictorios y ser coherente con lo que decimos. Y mantenerel entusiasmo y la convicción de que se puede salir de la situación. Si elempresario o líder se pasea por la empresa con cara de disgusto, con mensajesnegativos, nos metemos en una dinámica horrible. El líder tiene que mantenerseen su sitio, resolutivo, animado, con capacidad para mantener el esfuerzo y elcompromiso de todos.


¿Puedenjugar internet y las redes sociales algún papel en este tipo de psicologíadeportiva-empresarial? ¿Haces uso de ellas en tu trabajo?

Sí por supuesto. Utilizo mucho Twitter.Cada vez que mantengo una sesión con pacientes, muchas de las frases que lestransmito suelo colgarlas en el twitter, creo que muchas personas puedenbeneficiarse de ellas.  Me gusta elcontacto tan cercano e inmediato de esta red social.


Y paraterminar, ¿A qué le darías un giro de 360 grados si estuviese en tus manos esaposibilidad?

A la falta de profesionalidad, a la dejadez ya las personas que no son honradas en su trabajo.

 

Estefanía G. Asensi

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