Aunque sus orígenes no están del todo claros, no cabe duda que la vertiente más conocida de la danza española fue cultivada a orillas del río Guadalquivir. Desde allí y con el tiempo, ésta ha llegado a conquistar prácticamente todo el mundo por su genuino carácter. Aprovechando la celebración del Día Internacional de la Danza el pasado 29 de abril, en 360 Grados Press hemos decidido aproximarnos a este estilo de la mano de un proyecto joven, mediterráneo y de futuro.
“Quizáporque mi niñez sigue jugando en tu playa. Y escondido tras las cañas duerme miprimer amor. Llevo tu luz y tu olor por donde quiera que vaya“. Estosversos suenan conocidos. Pero en esta ocasión no es la voz de su autor, elcantante Joan Manuel Serrat, quien los recita, sino la de José Huertas, bailarín.Aunque a priori parezca que nada tiene que ver, éste último también se hadejado inspirar por el Mediterráneo en su profesión: la danza española. “Esto es flamenco fusión, que no confusión“,afirma. Así, su último proyecto comienza siempre con la letra de esta canción.A partir de ahí, el baile fluye.
Tacón. Más tacón. Ahora, dibujos conla punta del pie sobre el suelo. Entre tanto, palmas. Luego, las manos seretuercen grácilmente en el aire. En total, veinte bailarines imprimen caráctersobre las tablas siguiendo las directrices de José. “No hay que ser de Andalucía para saber bailar bien“, apunta éste. Porello, durante el último año ha decidido apostar por el talento varado a orillasde este mar. Su amplitud de miras viene inspirada en gran medida por sumaestro, el gran Antonio Gades, quien era alicantino. Sea como fuere, el factordeterminante para atracar en este puerto ha sido otro. “El Mediterráneo aporta libertad en todos los sentidos“, confiesaJosé.
Esta misma idea es compartida porMarta Fernández, bailarina también de gran trayectoria y su ayudante dedirección. Ambos aúnan esfuerzos por dejar un buen legado a las nuevasgeneraciones del baile. “Espero que ellosaprendan de todo esto igual que nosotros aprendimos. Sobre todo, a trabajar,trabajar, trabajar y a seguir trabajando“, explica ella. En este caso, lalección combina el flamenco más puro con el estilo contemporáneo y algún queotro toque de clásico. Pero, eso sí, siempre fieles a los principios. Enpalabras de Marta: “La esencia es mirarpara atrás y mantener la escuela de nuestros maestros“. “Hay que ser honrado y no desvirtuar. Hay quehacer las cosas porque se sienten“, completa José.
Así, a base de esto mismo, trabajo yprincipios, estos veinte jóvenes están escribiendo el futuro del flamenco. Sudedicación es total. Los ensayos previos a una puesta en escena son un claroejemplo de ello. “¡Eso es!”. “¡Olé ahí!“. “No, parad, ¡parad!“. Resta menos de una hora para una actuación yJosé les sigue dando instrucciones. Nervioso como es él, que ya lo decía sumadre, el director de la compañía no para quieto entre el escenario y la cabinade luz y sonido. El objetivo es bordar los pasos y, para ello, hay que trabajarduro sobre el escenario que toca en cada ocasión. Los aprendices refunfuñande vez en cuando, pero Marta pone orden con dosis de mano izquierda. Y vuelta aempezar con cada una de las piezas hasta que se logra dar en el clavo.
Poco después, llega el momento de laverdad: el público ocupa las butacas del teatro. Cada actuación es unaconsolidación de lo aprendido anteriormente. Así, las orientaciones de José yMarta resuenan en la cabeza de los bailarines mientras que la música en directode dos
guitarras, un cajón y un violín marcan el ritmo a seguir. Finalmente, laentrega da sus frutos: el espectáculo es vibrante de principio a fin, cuandolos asistentes devuelven el sentimiento recibido desde el escenario a modo deinterminables aplausos. “Después de todoel esfuerzo, ver que lo clavan es una gran satisfacción para mí“, confiesaJosé.
Con todo, se puede concluir que elflamenco tiene un prometedor porvenir, emulando la canción de Serrat, “cerca del mar, porque ellos nacieron en elMediterráneo” y decidieron dejarse llevar por dos maestros de bandera.
Para seguir de cerca a la Compañía DanzaJoven del Mediterráneo puede consultarse su web o su página oficial de Facebook.
Adrián Cordellat