Tiene todos los ingredientes que se necesitan para cocinar una película española de esas que se emiten en Cine de Barrio. No le falta de nada, cuenta hasta con un jovencísimo Andrés Pajares haciendo de graciosillo. Sale el Parque de Atracciones de Madrid y, ¡cómo no!, la Manga del Mar Menor y el Festival de Benidorm. Hay rubias, hay morenas, hay atardeceres, hay melancolía Es un pastelón de cinta.
La vida sigue igual narra los comienzos de Julio Iglesias en elmundo de la música, eso sí, intercalando las peripecias con un popurrí decanciones que a aquellos a los que no les guste pueden acabar odiando a sutelevisor.
¿Quién no sabe queJulio Iglesias era un prometedor guardameta de la cantera del Real Madrid?¿Quién no sabe que sufrió un accidente que le obligó a renunciar al fútbol?Imagino que la mayoría de ustedes sabrían estos chismorreos e imagino que lamayoría de ustedes no habrán visto este largometraje. Sinceramente no entiendoaún como Julio Iglesias se prestó a poner la cara aquí.
Rodada en 1969,dirigida por Eugenio Martín, hay quien justifica su rodaje porque en aquellaépoca aún no existían los vídeo clips y Julio Iglesias tenía buen porte parasalir en la pequeña pantalla. Si Raphael, Rocío Dúrcal, Camilio Sesto o RobertoCarlos tienen su película, ¿cómo no iba a tenerla nuestro Julito? Eso sí, lesprometo que de las otras no les hablaré.
Javier Montes