Dispositivos

La televisión está cambiando. La revolución de Internet ha llegado a lo que muchos llamaban ‘caja tonta’ y lo ha hecho para quedarse y dar un giro radical a las posibilidades que ofrecía hasta ahora el rey de los reproductores multimedia. Conscientes del aumento del números de telespectadores que compaginan ver la televisión con interactuar con su smartphone o tablet, los fabricantes se han apresurado a integrar en uno todos los dispositivos.

Ni los más optimistas del laboratorio de pruebas de Samsung, en Corea del Sur, podían imaginar que su último modelo, el Samsung Galaxy S3, fuera a revolucionar el mercado como lo ha hecho. Desde que salió a la venta el pasado 29 de mayo, el gigante surcoreano ha vendido más de 30 millones de unidades, triplicando las cifras del Galaxy S2 en el mismo periodo de tiempo. Los números hablan por sí solos: cada día se venden 120.000 Samsung Galaxy S3 en todo el mundo, es decir, a 5.000 unidades por hora. Cada segundo se vende uno.

Hace unos meses, en el Mobile World Congress, Sony presentó el Sony Xperia S, el primer móvil realizado por la casa japonesa una vez rota su unión con Eriksson. El Xperia S es el nuevo padre de familia de la gama Xperia NXT, su buque insignia, el más potente y el más grande de todos sus modelos hasta la fecha.