Sexo, amor, literatura, régimen franquista, colonialismo, Barcelona, rebeldía, violencia. Todos estos argumentos conforman los ingredientes de El cónsul de Sodoma, una película dirigida por Sigfrid Monleón (2009) que obtuvo cinco nominaciones a los premios Goya (por cierto, este domingo a las 22 horas tenemos una cita para ver quiénes son los ganadores de este año).
Protagonizada por Jordi Mollá, a quien se le dan bienlos papeles de homosexual, El cónsul de Sodoma narra la vida de Jaime Gil deBiedma (1929-1990), uno de los poetas más influyentes de la segunda mitad delsiglo pasado. La sinopsis de la película subraya que la historia de estepersonaje estuvo marcada por la contradicción: por un lado, pertenecía a laalta burguesía catalana y era el secretario general de una importantemultinacional del tabaco; por otro, vivía su faceta de poeta y homosexual quese rebelaba contra su entorno familiar.
Una voz en off intercala fragmentos de las poesías deJaime Gil de Biedma entre excesivas escenas de cama, miradas punzantes y muchohumo de tabaco.
Quizá le sobra metraje (la cinta dura 110 minutos)pero la extravagante escena final bien merece el aburrimiento de determinadosmomentos de la película. Si quieren conocer un poco más de la vida de Gil deBiedma no se arrepentirán pero no esperen nada del otro mundo, es mejorzambullirse entre las páginas del poeta.
Jimmy Entraigües, Hortanoticias