A degustar: Show Me a Hero

Esta semana nos atrevemos a recomendar encarecidamente una serie que apunta maneras de destacar entre las propuestas de 2015. Es más, nos aventuramos a decir que es carne de Emmy. Y hasta ahí podemos leer por el momento.

Viajamos hasta finales de los años ochenta para situarnos en Yonkers, una pequeña ciudad del estado de Nueva York. Allí, el político demócrata Nick Wasicsko – Oscar Isaac – es elegido alcalde a sus 28 años de edad, siendo el más joven para su cargo en un núcleo de población estadounidense superior a los 150.000 habitantes. Recién adquirida su nueva posición, la cual estrena pletórico, se resuelve un tedioso proceso judicial: la orden le obliga a acatar un proyecto de desegregación social por el que ha de construir 200 viviendas de protección oficial para personas sin recursos, negros e hispanos en su mayoría, en barrios de clase media, es decir, habitados por blancos en su práctica totalidad. El panorama, en consecuencia, se ensombrece ipso facto para el protagonista.

Con todo, la división de clases sociales, la burocracia administrativa, los tejemanejes de la política a nivel local, la vida de los suburbios o los conflictos raciales se retratan en esta creación de David Simon. Efectivamente: el mismísimo artífice de The Wire ha regresado a la televisión – por la boca muere el pez, podría decirse – con una miniserie que muestra en solo seis capítulos – los justos y necesarios – cómo los ‘héroes’ también pueden tocar fondo. En definitiva, se trata de una dosis de realismo basado en una vida diaria que, aunque un tanto remota en tiempo y distancia, bien se podría extrapolar al aquí y ahora. Porque hay problemas que, desgraciadamente, permanecen irresolutos y el racismo se encuentra entre ellos.

Una narración con maestría y unas interpretaciones de sobresaliente – apunte curioso: Winona Ryder se encuentra entre el reparto – hacen el resto en Show Me a Hero, una producción que hará las delicias de los amantes de Bruce Springsteen con su banda sonora, de los aficionados a los aires de documental – se basa en un ensayo escrito por la periodista Lisa Bellkinen en 1998 – y de los seriéfilos que buscan calidad más allá de los fenómenos de masas. Degustadla, en serio.

@LaBellver

Óscar Delgado