Investigadores europeos reunidos en Madrid presentan nuevos datos sobre los beneficios de esta bebida
REDACCIÓN, Madrid. Especialistas en medicina y nutrición se reunieron esta semana en Madrid en el marco del III Simposio Internacional de la Cerveza (5th European Beer and Health Symposium) para analizar las últimas investigaciones científicas sobre el consumo moderado de esta bebida y profundizar en su historia y su vinculación con la cultura y los hábitos de las civilizaciones clásicas mediterráneas.
La cerveza es buena para la salud y puede ayudar a reducir el riesgo cardiovascular y prevenir determinados tipos de cáncer. Con todo, su consumo ha de ser responsable, tal y como explicó en el encuentro el profesor Manuel Díaz Rubio, jefe de Servicio de Aparato Digestivo del Hospital Clínico de Madrid, quien subrayó la importancia de la moderación y la responsabilidad: “Es fundamental transmitir a la población que el consumo de cerveza, la bebida fermentada de menor graduación (4-5º), debe ser responsable, moderado (no debe superar los 30g/día para los varones -tres cañas de cerveza- y los 20g/día para las mujeres -dos cañas de cerveza-) y en el marco de una dieta equilibrada”. Durante este encuentro se presentó también el documento “Effects of Moderate Beer Consumption”, una recopilación bibliográfica actualizada de las investigaciones científicas que abordan los aspectos nutricionales de esta bebida.
CERVEZA Y SALUD CARDIOVASCULAR
Las bebidas fermentadas de baja graduación ricas en polifenoles tienen un efecto protector adicional frente a enfermedades cardiovasculares. En este sentido, el doctor Ramón Estruch, del Servicio de Medicina Interna del Hospital Clínic de Barcelona, y director del Estudio PREDIMED (estudio que analiza la eficacia de la Dieta Mediterránea en la prevención de la enfermedad cardiovascular) comentó que “existen datos que indican que no todas las bebidas con contenido alcohólico son iguales. Las bebidas fermentadas de baja graduación (cerveza, vino y sidra), ricas en polifenoles, tienen un efecto protector adicional frente a enfermedades cardiovasculares que las bebidas pobres en estos compuestos como las destiladas de mayor graduación”.
En el contexto del estudio PREDIMED, el doctor Estruch presentó un estudio sobre los posibles efectos del consumo moderado de cerveza en una población de 1.249 sujetos con alto riesgo vascular. “Aunque los resultados de este estudio son todavía preliminares se ha comprobado que los sujetos incluidos en el estudio (edad media 68 + 6 años, 43% varones, 57% mujeres) con alto riesgo vascular, que beben moderadamente cerveza presentan un patrón alimentario más sano, más próximo a la dieta mediterránea tradicional, que los sujetos que no consumen cerveza. Ello implica un mayor consumo de verduras, legumbres, fruta, pescado y también carne, junto a un menor consumo de leche y derivados, comparado con los que manifiestan no consumir cerveza”.
CERVEZA Y CÁNCER
El xanthohumol, un potente antioxidante que contiene la cerveza, ejerce un importante papel quimiopreventivo. Así lo explicó la doctora Adriana Albini, presidenta de la Sociedad Italiana de Investigación del Cáncer, quien comentó que recientes trabajos científicos confirman que el xanthohumol, uno de los flavonoides presentes en la cerveza, podría ayudar a prevenir ciertos tipos de cáncer. Las investigaciones realizadas hasta el momento permiten afirmar que el xanthohumol ejerce un papel antioxidante muy importante, incluso mayor que el de la vitamina E, ya que contiene una de las catequinas más activas en la inhibición y prevención de la angiogénesis. Según los trabajos realizados por esta investigadora, el xanthohumol posee un potencial efecto quimiopreventivo, ya que las células tratadas con este antioxidante mostraron una importante reducción del factor de expresión del crecimiento tumoral.
En España, el Grupo Español de Investigación en Cáncer de Mama (GEICAM), está realizando una investigación entre 1.000 mujeres para valorar la relación entre el cáncer de mama y el consumo habitual de cerveza. GEICAM parte de la hipótesis de que los flavonoides presentes en la cerveza poseen una capacidad antioxidante significativa, y destaca que la cerveza es la bebida fermentada con menor contenido alcohólico y aporta a la dieta ácido fólico (4 mgr/100 ml), aspecto relevante, ya que diversos estudios han puesto de manifiesto la relación entre cáncer de mama y mujeres con baja ingesta de ácido fólico.
Redacción Madrid