Las nuevas tecnologías protagonizan, queramos o no, nuestra vida cotidiana y el periódico regional en el que trabaja Peláez no está al margen de esta realidad.
Asíse desprende de los cables recibidos esta semana en los que se escucha unaconversación entre el periodista de provincias y su jefe sobre las tablets yotra acerca del marketing viral y la importancia de las redes sociales. Perotambién la amargura, la tristeza, la pesadumbre son producidas en la fábrica dela vida y hemos podido escuchar los sollozos del jefe del diario echando demenos su época de joven atleta en la que tenía como rival nada más y nada menosque a Rubalcaba o esa saudade dePeláez, incapaz de comprender una vida que nada tiene que ver con lo que elredactor siempre había imaginado.
Jueves 17 de mayo
¿Mirándose al espejito, Peláez?
No es un espejo, jefe, es una tablet.
¿Una qué?
Una tablet
¡Dios! Tendré que pagarle algo, aunque sea en macarrones, se come usted lasletras, hijo.
No, jefe, se dice tablet, no tableta. Es inglés.
Odio a los ingleses.
¿Por qué, jefe?
No sé, toda esa niebla en la cara
¿y para quésirve al aparatito?
Para todo.
¿Cómo una navaja multiusos?
Más o menos, jefe
¿Hay que afilarla?
No hace falta.
Me interesa, entonces ¿Es cara?
Más cuesta la ignorancia, jefe.
¡No me diga! ¿A cuánto está? ¿Como la merluza depincho?
Más aún
¡Jodón! Cómo está el patio, Peláez.
Oscuro y mohoso, jefe. Oscuro y mohoso.
Viernes 18 de mayo
Peláez, ¿quién es ese tío?
¿Cuál?
El de las gafas hasta las rodillas.
¡Ah! Es un experto en viralidad.
¿Tenemos piojos?
No, jefe.
¿Ladillas?
Por favor
se trata de un tema de marketing.
Marketing, eh
¿eso es lo de tirarse desde unpuente con un muelle a la espalda?
No, son las técnicas que se utilizan para elestímulo de la demanda.
Como por ejemplo…
Tuitear.
A mí no me tutea ni dios, Peláez.
Usar twitter, jefe, las redes sociales.
Ah
ya
las redes sociales
¿se refiere a loscócteles, las cenas con puro y pacharán, las noches en el Amazonas?
Hablo de internet, jefe.
No me interesa.
Pues es el futuro.
Por eso mismo. Solo hago planes para ayer.
Lunes 21 de mayo
¿Qué le sucede, jefe? ¿Por quésolloza?
Snif
por esta decadencia, Peláez, snif
Ya, jefe, yo también lamento la crisis de valores de nuestro modelo social.
Ni crisis de valores ni leches, Peláez. Me refiero a esta panza y a estaspiernecillas de avestruz. ¿Sabe que fui atleta en mi juventud?
No lo sabía, jefe.
Corría los cien metros en santiamén coma cero siete.
¡Caramba! Ni Rubalcaba.
Alfredín era rápido, sí, y aerodinámico el muycabrón, pero le ganaba siempre.
¿Y cómo se ha dejado ir de esa manera, jefe?
Quién sabe, Peláez, un día dejas de correr, alsiguiente de caminar y ahora me cansa hasta el billar.
¿Juega al billar?
Qué va, lo veo en Eurosport cuando llego a casacada madrugada, pero acabo con agujetas.
Agua con azúcar, jefe.
Sí, es lo que hago. Agua con gas, azúcar, ron,lima y hierbabuena.
Eso es un mojito.
Llámelo como quiera, Peláez, pero funciona.
Quizás deba apuntarse al gimnasio, jefe.
Podré caer bajo, Peláez. Podré despedir atrabajadores que no lo merecen, traicionar a una fuente e incluso sobornar aquien sea por obtener una noticia. Pero soy un hombre de honor y nunca pedalearéen una bicicleta sin avanzar.
Martes 22 de mayo
Peláez, ¿qué hace?
Escribo un reportaje sobre el pop español.
¿Para qué?
Para la sección de cultura.
¿De qué periódico?
Del nuestro, jefe.
¿Pero por qué se fustiga de esa manera, hombre?
Tenemos que hablar de música, de cultura. Una vez al año no hace daño.
No sé por qué se pasa la vida con esas migajas,Peláez
Alguien tiene que hacerlo.
Ya, pero
el pop español
a ver léame un verso deuna canción.
Hay rebajas en el Mercadona y yo aquí en misalón.
No siga, Peláez, por favor.
¿Quiere que deje de escribirlo?
No, continúe, pero, hágame un favor, maquételoantes de suicidarse.
Lo haré.
Adiós, Peláez
¿Se va?
Por supuesto
¿Adónde?
Al Mercadona, Peláez, ¿dónde va a ser?
Miércoles 23 de mayo
¿A qué se debe esa carita de pena,Peláez?
Me embarga la tristeza, jefe.
¡Putos bancos! A mí me han embargado la casa, el coche y los tirantes con labanderita de España. ¡Porca miseria!
No, jefe, hablo de morriña.
¡Ah! Es la alergia, Peláez, yo también hablo un poco de nariz estos días.Aléjese de los chopos.
Saudade, jefe
¿Saudade? ¿Pero qué es esto? ¿Un brindis? ¿Dóndeestán las copas? ¿Dónde el champán? ¿Dónde las burbujas?
La melancolía…
¿Se refiere a aquel disco de Kenny G? Creo que lotengo
Olvídelo, jefe.
Me encantaría, pero tengo una memoria prodigiosa,Plómez.
Peláez
Encantado de conocerle, Sr. Peláez, ¿qué haceusted por aquí?