Hace unos años que las cadenas de televisión empezaron a emitir junto a la mosca -el término informal empleado para referirse al logotipo que aparece en una esquina de la pantalla identificando al canal- el hashtag promocional del programa que se esté emitiendo en el momento. El resultado fue casi inmediato. Twitter ya estaba de moda.
Desde entonces no hace falta esperar a la mañana siguiente para comentar lo visto en la televisión la noche anterior, ahora lo que se lleva es tuitear al instante sobre lo que se está viendo. De hecho este fenómeno se conoce como multitasking, es decir, consultar el smartphone o la tablet a la vez que vemos la televisión. En el prime time los presentadores se esmeran por colar sus hashtag en los Trending Topics, muestra inequívoca para el sector de que los espectadores están enganchados a su programa.
Sin embargo, a la televisión en general no le basta con eso. Hoy por hoy que los telespectadores conviertan en tendencia un hashtag es insuficiente. Se necesita más espectáculo. Anoche, mismamente el programa de televisión Todo va bien, de Cuatro, tenía como invitado al famoso ‘pequeño Nicolás’ y el gran atractivo de la velada era que el chaval se iba a abrir en directo su primera cuenta de Twitter. En apenas 12 horas @FranNicolas_G superó los 32.000 seguidores después de haber compartido un tuit con un selfie en el que aparecen algunos de los protagonistas del programa, un mensaje que acumula 2.400 retuits y 2.100 favoritos.
Esto me hace pensar en qué será lo siguiente. Lamentablemente hace tiempo que pienso que todo lo que toca la televisión se acaba convirtiendo en mierda. La mosca de Twitter ya está detrás de la tele.
David Casas