360gradospress descubre al ortopeda que fabrica las espinilleras de muchos jugadores de fútbol de elite
Cientos de piernas de escayola identificadas con el nombre de futbolistas de elite se acumulan en las estanterías de la clínica-taller del ortopeda técnico Luis Mollá. Afincado en Xátiva (Valencia), fabrica artesanalmente las espinilleras y las plantillas de las botas de los jugadores del Liverpool, Barcelona, Valencia, Villarreal, Zaragoza, Almería
Torres, Iniesta, Güiza, Gerrard, Fabio Aurelio, Ayala, Skertel, Reina, Sissoko o Villa son algunos de los nombres que han pasado por sus manos. A todos les somete a una sesión personalizada basada en la captación de la medida exacta de la espinillera a partir de un molde de escayola cuyo resultado es una reproducción fidedigna de la pierna del jugador. Conserva los moldes y los clasifica para usarlos de nuevo cuando la estrella quiere renovar sus espinilleras. 360gradospress ha entrado en su taller y ha conocido las piernas (de escayola) de los futbolistas, sus supersticiones y los diseños más íntimos, los que cabalgan debajo de las medias de las estrellas.
“Todas se hacen a medida. Las hago en el color que el jugador quiere, con la talla y el tamaño que elige. A Joaquín yo le conocí cuando jugaba en el Betis y se las hice con el color verde hasta que un día me llamó con su característica gracia gaditana para pedirme que paralizara el verde y lo cambiara por el naranja porque acababa de fichar por el Valencia”. Luis Mollá, que ha continuado de esta manera con el negocio familiar emprendido hace 30 años, acumula anécdotas con la nómina de jugadores que le encargan espinilleras y plantillas a lo largo de la temporada. Cada vez son más los que acuden a él por el efecto del boca a boca entre los propios futbolistas.
Todo comenzó hace siete años, después de que Cañizares acudiera a través de uno de los médicos del Valencia C.F. a este ortopeda para hacerse con una prótesis con cremalleras sustitutiva de la escayola (ortesis desmontable) para superar la lesión que el guardameta, hoy retirado, sufrió en un partido en Eindhoven que le afectó al peroné. “Después de aquello, nació la posibilidad de hacer espinilleras de fibra de carbono personalizadas y me puse en ello, hasta hoy”, explica Mollá.
Uno de los primeros futbolistas que probó su espinillera fue Fabio Aurelio, actualmente jugador del Liverpool. Precisamente, el brasileño ha hecho publicidad entre sus compañeros en el equipo de Rafa Benítez y ahora toda la plantilla viste espinilleras del ortopeda de Xátiva. “Das el móvil a los futbolistas y parece que hay más que se lo guardan que lo tiran y te vuelven a llamar”, matiza Mollá.
El jugador nunca visita el taller de Luis, es el ortopeda quien se desplaza a ver al futbolista para tomar la muestra o hacer el molde de su pierna, como hizo hace unos meses para tomar las medidas de los jugadores del Liverpool. “Conozco a jugadores, luego uno se va a otro equipo, comenta y es cuando funciona el boca a boca, incluso los jugadores que se van fuera, como Güiza, te llaman para decirte: Quiero otro par”. A partir de ahí, y como un coleccionista de piernas de futbolistas en yeso, da forma a la espinillera que se adapta perfectamente a la extremidad del jugador.
600 euros
El proceso de fabricación contempla la utilización de ocho capas de tela de fibra de carbono endurecida con resina al vacío que, con un forro blando, da como resultado una espinillera única, personalizada y exclusiva al servicio de las habilidades futbolísticas del propietario, que paga 600 euros por cada par de 160 gramos de espinilleras (80 gramos pesa cada una aproximadamente).
“Es realmente lo que hacemos los ortopedas técnicos cuando alguien necesita una pierna, hacer un molde y sobre el mismo fabricar un laminado a la medida de un paciente, pero en este mundo del fútbol llama más la atención”. Luis escayola al jugador con yeso de secado rápido desde la rodilla hasta el pie, que se seca en cinco minutos y se le retira con un corte trasero que luego vuelve a cerrar para conservar la pierna del futbolista como referencia personalizada para sus diseños. Así queda la reproducción lista para ser utilizada las veces que Luis reciba el encargo del jugador.
Fibra de carbono
La espinillera del deseo para tantos jugadores de elite ofrece una fiabilidad ante el impacto, garantizada por la dureza de la fibra de carbono, prácticamente irrompible. Luis experimentó con sus primeros diseños hasta que comprobó que eran eficaces en el terreno de juego. Recuerda las de Mendieta, uno de los primeros pares que entregó: “Lo vi por la tele y cuando le hicieron una entrada dura me pregunté si la espinillera habría resistido, algo de lo que me cercioré cuando recibí un mensaje del futbolista después del partido felicitándome por el producto”.
Supersticiones
La Vírgen del Carmen, el nombre de los hijos, el nombre del perro, la bandera del país, el número del jugador, la mascota, el color
“los jugadores te piden lo que les gusta y tú se lo haces”. Luis sabe que cada uno tiene sus supersticiones a la hora de elegir el modelo de espinillera y él cumple con sus deseos siempre, “personalizándolas con impresiones de vinilo y con los forros del color que me pidan”.
Otros deportes
Luis Mollá también ha trabajado para otras disciplinas deportivas, como el baloncesto o el tenis. Los jugadores del Valencia Básket han recurrido a Luis Mollá para conseguir las plantillas de su calzado, para lo que tuvo que improvisar unos moldes mayores que el estándar con los que tomar medidas de la peana de los baloncestistas, algunos con un 54 de pie. Asimismo, ha fabricado plantillas para las tenistas Safina y Anabel Medina.
Marga Ferrer