Por Marga Ferrer, fotoperiodista
Mamá, de mayor quiero ser artista.
Tendemos a mitificarlo todo: profesiones, personas, momentos, edades Nada ni nadie se escapa de la proyección. Aún siendo ya mayores, seguimos pensando en futuro, y es que soñar es el combustible necesario para seguir adelante.
Los sueños, al alcance de todos, son una simple ilusión. Pero tan idílica meta no tiene por qué ser sinónimo de fracaso, ni de éxito. Lograrás algún día y/o en algún momento rozar la felicidad, será tu decisión gladiadora la que te hará acercarte un poco más, será la opinión de alguien cercano la que te aproximará o te alejará será finalmente tu talento y tu fuerza la que te hará triunfar. Triunfo, esa otra ilusión pasajera, infiel compañera, interesada y dulce.
Mamá, de mayor quiero ser artista, como casi todos los mortales.
Sin embargo, si de verdad quieres, ¿por qué no? El camino no será fácil, la meta no estará a la altura.
Óscar Delgado