Los peligros de aferrarse al pasado
Tendemos con demasiada frecuencia a trazar paralelismos con el pasado. Es como si tuviéramos la imperiosa necesidad de justificarnos, de desdramatizar situaciones lanzando circunspectos déjà vu convertidos en déjà vécu, aunque solo sea en una cita bibliográfica de referencia a pie de página. El temor a lo desconocido nos trae estas reacciones que, en definitiva, son fruto del miedo a perder lo que tenemos. Un agarrarse a un hierro ardiendo aunque nos quememos. Una manera como otra de engañarnos sabiendo que vamos a morir inexorablemente. El engaño, queridos, siempre es doloroso.