La exposición que exime de una muerte en la hoguera
Parecen indiferentes, cada uno en su particular atmósfera, pero en el fondo todos comparten un mismo temor: el fuego. Conviven día y noche uno al lado del otro durante unas cuantas semanas, pero luego se separan como si no se hubiesen conocido nunca. Están hechos de la misma pasta, algunos incluso comparten forma, pero la esencia es diferente en cada caso. Se trata de los Ninots, esas obras de arte que invaden la ciudad de Valencia todos los marzos, sin falta, como la primavera. Desde el pasado 1 de febrero que unos pocos privilegiados se exhiben por si logran ser perdonados y, por tanto, se libran de las llamas.