Me asquea la forma de gestión reptil de este gobierno. Con sus tentáculos dispara con balas de veneno a todo aquel que mueva un dedo lejos del viento o piense diferente. Estos adoradores de la mentira y la manipulación solo rinden pleitesía al dinero y a los que gobiernan el mundo de las finanzas. Del pueblo no se acuerdan más que para jalear la candela en las fechas de elecciones.
![[Img #21707]](http://www.360gradospress.com/upload/img/periodico/img_21707.png)
En ese tiempo se ponen el disfraz de Hamelín y engatusan a los más débiles, a toda la famélica legión de ilusos e ignorantes. Luego levantan un muro y ponen centinelas en las puertas. El pueblo ya lo sabe, por eso cierra filas y no deja que por la ranura de la puerta se cuele la hedionda fila de monjes de la indiferencia.
El pueblo, nuestra gente, supo a tiempo que el dolor se rompe por una sola orilla y la desigualdad social es un abismo cubierto de inocentes.
![[Img #21712]](http://www.360gradospress.com/upload/img/periodico/img_21712.jpg)
El pueblo, la gente que espera en el semáforo y en todas las colas que chorrean amargura, no vive de palabras que mueren con la primera brisa, sólo quiere construir mejores pilares con visa al futuro y que el hoy no duela de tanto vacío.
El pueblo solo quiere una Justicia justa y unos gobernantes que no miren a otra parte cuando su gente robe y convierta las calles en un erial lleno de trampas, donde la ley del más fuerte avasalla y la voz de los que no tienen voz sea perseguida. Porque este pueblo ya no aguanta más a estos gobernantes falsos que no gobiernan y solo espera que el fuego de sus mentiras se apague con las primeras lluvias.
Foto: Carmen Vela