Franz Ferdinand, Starsailor y Mando Diao, embaucan a 20.000 personas en el festival MTV Winter
ÓSCAR DELGADO, Valencia. ¿Cómo es posible que en España se hable tan poco el inglés? Lazaros, originario de Rodas (Grecia) intentó por tres veces el pasado martes 24 cenar en alguno de los bares y restaurantes ubicados en el entorno de la Ciudad de las Artes de Valencia. Pensaba que si hablaba en inglés los camareros le entenderían mejor que en griego, pero no tuvo suerte. Y eso que a escasos metros de los locales en los que protagonizó sus intentonas unas 20.000 personas se amontaban para ver la MTV Winter, festival gratuito pagado a golpe de talonario por la Generalitat Valenciana con un cartel de lujo: Mando Diao, Starsailor y Franz Ferdinand (cuyo cantante, Alex Kapranos, es de padre heleno). Un concierto internacional de pop y rock inglés para un público español de estética indie, con el toque internacional de los alumnos de la beca Erasmus que fueron los que mejor canturrearon las letras anglosajonas de los temas de más éxito de las bandas británicas.
Lazaros sólo quería cenar, no le interesaba el concierto. Él había viajado a Valencia por otro motivo, ni siquiera sabía por qué había tanta gente congregada en el entorno de la Ciudad de las Artes, ajeno al cartel de la MTV. Como aficionado al Panathinaikos, equipo griego que al día siguiente empató a uno en Villarreal en el partido de ida de los octavos de final de Champions, trataba de quitar el hambre de la víspera, pero su inglés, a pesar de ser más que correcto, no le sirvió hasta que alguien salió a su rescate y tradujo al propietario de un restaurante su extraña pretensión: pedir los tres platos de un menú. A menos de cien metros de allí, miles de personas tomaban posiciones para el momento estelar de la velada, el concierto de Franz Ferdinand. Antes, los valencianos Polock se encargaron, a eso de las 20:00 horas, de inaugurar el festival, eso sí, cantando sus temas de rock en inglés y con un recinto aún a medio gas, con la gente atrincherada en el entorno ajardinado del complejo en botellones improvisados que les ayudaran a calentar motores de cara al concierto estrella de la noche. Las barras improvisadas del interior sólo vendían refrescos sin alcohol “y muy caros, no nos ha quedado más remedio que traernos la bebida y entrar más tarde”, explicaba Sonia, vecina del barrio valenciano de Campanar.
Muchos que no los conocían se llevaron la sorpresa de la velada con Starsailor, los siguientes en saltar al escenario. Presentaron su cuarto trabajo, All the plans y para algunos, como Manuel, estudiante manchego de Sociología, “los mejores de la noche, me ha sorprendido gratamente su directo”. Con Four to the floor, uno de los temas más conocidos de la banda, los asistentes, que seguían accediendo en un goteo permanente al recinto, protagonizaron la primera de las comuniones de la noche con los artistas. Objetivo conseguido, la gente ya estaba preparada para nuevas emociones, pero todavía había que darle un punto más, el de rock alternativo de Mando Diao. Ritmos africanos fusionados con música disco y guitarreo, propiciaron que la explanada del Museo de las Artes adquiriera la temperatura deseada por los organizadores para el comienzo del momento más esperado de la noche: la actuación del cuarteto escocés Franz Ferdinand.
El otro griego
Un hola de Alex Kapranos, líder de la banda de Glasgow de padre griego y de madre inglesa, puso la breve nota introductoria a la actuación con la que, con media de hora de retraso respecto al horario previsto, presentaron los temas de su tercer álbum: Tonigh: Franz Ferdinand, salpimentado por las propuestas clásicas que les han catapultado a la fama, como Do you want to, con la que el recinto botó al ritmo de la entrega de los fans allí congregados. Con todo, hubo unas 10.000 personas menos que en la edición anterior de la MTV Winter. Por entonces, con menos grados de temperatura, encabezaron el cartel The Cure
Marga Ferrer