La universidad callejera abre sus puertas
Madrid, Ibiza, Jaén, Castellón y Granada son sólo algunas de las ciudades españolas que un día a la semana abren las puertas a la universidad callejera, dejando paso a una calle amplia, protegida por una valla de acero que vigilan agentes policiales. Los “estudiantes” que representan este escenario de venta ambulante, acuden puntuales a la clase y preparan su pupitre, sacan sus bienes más preciados, o no tanto, y los exponen en la mesa o los mantos que despliegan en el suelo.